Costos Directos
Se les conoce como Costos Directos al conjunto de las salidas de dinero o erogaciones en las que incurre una organización, que están directamente relacionadas con el desarrollo del proceso o bien con la obtención del producto o servicio.
Los costos directos son necesarios para obtener un producto o servicio (materias primas, partes o componentes complementarios y manos de obra de los trabajadores del área de producción o servicio). Estos costos se definen así debido a que afectan directamente la determinación del precio de un producto, el cual tendrá que ser recuperado a través de la determinación de su precio de venta al público y por las ventas del mismo en el mercado para el cual se destinó.
Algunos ejemplos de costos directos para diferentes productos y servicios son los siguientes:
Productos creados o transformados a partir de materias primas o materiales iniciales como lo son: papel, madera, acero, cartón, plástico, etc.; insumos directos o componentes complementarios como tintas, tornillos, clavos, pegamento, etc. y mano de obra como lo son los sueldos, salarios, prestaciones y beneficios, ya sea en especie o económicos que recibe el personal que interviene en las líneas de producción de estos productos, desde el área de recepción de materiales en el almacén, hasta el almacén de producto terminado, incluyendo toda la fase de producción o transformación de esa materia prima); y finalmente los servicios de las áreas productivas (agua, luz, etc.) que son necesarios para que la materia prima sea transformada en el producto final.
En empresas de servicios, los costos directos pueden relacionarse con viajes, congresos y otros eventos en donde el costo o gasto está específicamente ligado al servicio ofrecido.